27 de septiembre de 2018

Tan poca vida por Hanya Yanagihara


Título: Tan poca vida
Autor: Hanya Yanagihara
Editorial: Lumen
Nº Pág.: 1008 pág.
Género: Novela Contemporánea
Primera edición: septiembre 2016



Una novela que sigue el hilo de la gran literatura norteamericana y que ha llegado para dar un nuevo sentido al silencio y un nuevo valor a las emociones.
La novela que hay que leer.
Para descubrir...
Qué dicen y qué callan los hombres.
De dónde viene y dónde va la culpa.
Cuánto importa el sexo.
A quien podemos llamar amigo.
Y finalmente...
Qué precio tiene la vida y cuándo deja de tener valor.
Para descubrir eso y más, aquí está Tan poca vida, una historia que recorre más de tres décadas de amistad en la vida de cuatro hombres que crecen juntos en Manhattan. Cuatro hombres que tienen que sobrevivir al fracaso y al éxito y que, a lo largo de los años, aprenden a sobreponerse a las crisis económicas, sociales y emocionales. Cuatro hombres que comparten una idea muy peculiar de la intimidad, una manera de estar juntos hecha de pocas palabras y muchos gestos. Cuatro hombres cuya relación la autora utiliza para realizar una minuciosa indagación de los límites de la naturaleza humana.


Todos tenemos distintos criterios para valorar lo que nos gusta y lo que no en un libro. Y todos son lícitos. Personalmente, una de las cosas que más valoro en una novela es que me haga sentir algo, lo que sea, pero que ese sentimiento, después de volver la última página, perdure, quizás no infinitamente pero sí durante un tiempo. Hoy traigo uno de esos libros que me han acompañado durante todo el verano y creo que seguirá conmigo por un tiempo y me gustaría compartirlo con todos.

"(...) siempre era más fácil creer lo que uno ya pensaba que intentar cambiar de parecer".

Quizás hayáis oído algo de Tan poca vida. Hace un par de años se convirtió en un éxito sonado, ganadora o finalista de todos los premios habido y por haber. Un descubrimiento. Un éxito mundial. Todo eso unido al hecho de que no es un libro "fácil" de leer de más de 1000 páginas demuestra que algo tenía que tener porque, seamos sinceros, no todos se atreven con esa extensión y menos con la temática que os vengo a contar a continuación. A mí se me quedó en la retina y allí ha seguido hasta que me lo he leído.

Nos encontramos con una sinopsis que nos promete relatar los entresijos de la amistad masculina, un tema bastante infratratado en el mundo literario, huelga decirlo. Conoceremos a nuestros cuatro protagonistas: Malcom, arquitecto con pretensiones artísticas, un chico de familia bien que sufre porque su padre no cree en él; Willem, que pronto pasará de camarero a actor de primera fila, un chico de familia modesta con un pasado difícil; JB, un hombre de raza negra al que le obsesiona en cierta medida la cuestión racial, que sueña con ser un pintor de éxito y pinta cuadros a partir de fotos de sus amigos; y Jude, un chico muy listo con un pasado peor que trágico que se convierte en un abogado con gran éxito profesional en su campo.

 "¿De qué tiene que preocuparse?", les preguntaba JB cuando veían a Malcolm angustiado por algo. Pero Jude sabía la respuesta. Se preocupaba porque estar vivo significaba preocuparse, porque la vida era aterradora y una incógnita".

Al inicio de la novela la autora nos presenta a los cuatro amigos que se conocen en la universidad y se convierten en inseparables. Es cierto que entre algunos de ellos hay más afinidad que con los demás, así JB y Malcolm hacen piña y Willem y Jude también. Es la parte donde vemos como funciona ese grupo de cuatro, como se interrelacionan y cómo la amistad fluye de uno a otro. La autora toca algunas teclas del tema racial, puesto que JB es negro y Malcolm es mestizo, pero pronto se deja al margen a favor de otros aspectos. Nos muestran sus ganas de progresar y triunfar a lo largo de varias décadas, situando la acción en Manhattan, como una burbuja geográfica. Nunca sabremos exactamente en qué año/época nos encontramos, no hay referencia a sucesos políticos o sociales que nos permite ubicar la historia. Con lo cual nos encontramos también en una indefinición temporal que lo que pretende es que nos centremos en los personajes y sus historias y relaciones, dejando aparte todo lo demás. 

Pero poco a poco la historia se irá centrando en uno de ellos, Jude. El hombre más misterioso, con un pasado ambiguo y muchos secretos. La autora nos empezará a contar el pasado de Jude a cuentagotas, comenzando en el momento en que de bebé fue abandonado en un monasterio y vivió durante su infancia a cuidado de los monjes. Pero ese viaje no será nada fácil porque el mismo Jude se ha autoimpuesto el olvido para inmunizarse de todo su pasado. Este viaje, que durará lo que dure casi toda la vida de Jude, es como una bajada a los infiernos para él. Personalmente me dio la sensación de que, a la vez que se nos contaba la historia, es como si Jude se la contase a sí mismo y la asumiese, para poder seguir en paz.

"Su silencio empezó siendo una protección, pero con los años se ha transformado en algo casi opresivo, algo que lo controla, y no al revés. Ahora no es capaz de encontrar una salida aunque quiera. (...) Sabe que hay una salida, pero no va bien equipado; no tiene herramientas para empezar a trabajar, y escarba inútilmente con las manos la superficie resbaladiza del hielo".

La autora nos irá introduciendo en una espiral extraordinaria pero muy dolorosa en la que nos daremos cuenta de la terrible realidad de este personaje. Jude St. Francis se convertirá en nuestro protagonista y Willem, su compañero, en una figura necesaria en su vida, su mejor amigo, la familia que nunca tuvo. Toda la novela se convierte en una oda al dolor, tanto físico como emocional. El nivel de intensidad va in crescendo durante las 1000 páginas y Hanya Yanagihara es una maestra en ello. Es como una montaña, una subida constante que no para. Como lectora quieres parar pero no es posible, páginas se suceden una tras otra y pese a que algo se te remueve dentro sigues, porque hay tan poca vida para vivirlo todo.

Con esto quiero decir que es una novela dura, difícil, dolorosa, aberrante en ocasiones, pero en su crueldad está la belleza. Logra enganchar al lector pese a que la mayor parte son descripciones, metáforas y muchos, muchos adjetivos. Hoy en día en las series está de moda aquello que "si algo puede salir mal, saldrá mal" y ese es el principio que inspira en parte esta novela. En alguna entrevista a la autora leí que su intención era destrozar un poco el sueño americano con el personaje de Jude. Es decir, él no lo ha tenido fácil pero en la edad adulta se convierte en un hombre de éxito, es respetado en su profesión, gana mucho dinero y pude decirse aquello de que "lo tiene todo en la vida". Pero no es así, Jude nunca lo tendrá todo porque su pasado siempre marcará su presente.  

"-¿Eres feliz?- le preguntó una vez a Jude (debían de estar borrachos).
-No creo que la felicidad sea para mí- le respondió él por fin, como si Willem le hubiera ofrecido un plato que no quería probar-. Pero sí lo es para ti, Willem".

Lo cierto que pese a todas sus virtudes esta novela tampoco está exenta de defectos. Y está bien que así sea, le añade autenticidad. Su extensión es una de ellas, pues hay partes que podrían perfectamente ser suprimidas, sus innumerables descripciones y temas introducidos al azar han sido muy criticados por algunos. Personalmente no me han hecho la lectura más pesada, ni han interrumpido excesivamente el argumento, a parte de alguna ocasión concreta. El estilo de la autora es coherente del principio al fin. Otros, han criticado la indefinición temporal y geográfica. Es verdad que he echado de menos un poco de contexto social, pues creo que nuestro entorno y los acontecimientos que nos rodean nos definen un poco. Y lo más probable es que esta historia tuviese lugar entre los años cincuenta hasta el nuevo milenio y es una época muy significativa para todos los aspectos de la vida.

También me he encontrado con algún error en la historia, dos frases con cientos de páginas entre ellas que no tienen sentido escritas juntas. Cualquier otro lector quizás ni lo notaría pero confieso que las últimas 400 páginas me las leí casi del tirón y lo tenía muy fresco. Por último, quería remarcar que me chirría un poco que los cuatro amigos tengan éxito en sus respectivos campos. No hay lugar en la historia de Hanya Yanagihara para el fracaso profesional, éste solo está reservado a la vida privada y/o emocional.

"Lo que no sabía del éxito era que volvía aburrida a la gente. El fracaso también la volvía aburrida, pero de otro modo. Los fracasados luchaban sin cesar por el éxito. Los que lo alcanzaban también luchaban, por mantenerlo. Era la diferencia entre correr al aire libre o en una cinta; correr era aburrido de cualquier manera, pero al menos el que corría al aire libre se movía por otro paisaje, con distintas vistas".

No me gustaría acabar esta reseña sin enfatizar en lo que creo que es de las mejores características de esta novela: sus personajes secundarios, que están todos tan bien caracterizados y con un papel tan definido. Mención especial para Harold, profesor de universidad que acoge a Jude bajo su ala; o Richard, amigo de JB que se convierte en un quinto integrante del grupo; o Andy, vaya papelón el de este hombre, una auténtica lucha entre el juramento hipocrático y la amistad. Las mujeres no tienen un papel en esta novela, pero al fin y al cabo es una historia de hombres, entre hombres y con hombres. Des de luego se echa por tierra la idea de que los hombres no siente, no sufren y no padecen. Exquisito.

Por todo eso me faltan palabras para describir lo que he "disfrutado" con esta novela. Y pongo las comillas porque no ha sido un disfrute en el sentido propio de la palabra. Más bien, he sufrido, he llorado (y mucho) y me he quedado inmersa en una oleada de emociones que no puedo ni describir. Pese a todos sus defectos creo que será mi mejor lectura del año, y si no, la que más me ha hecho sentir y pensar. JB y Malcolm, Willem y sobretodo Jude, se quedarán conmigo durante un buen tiempo simplemente porque no les quiero dejar marchar. Me he identificado tanto con ellos y los he sentido tan cerca... Sé que es muy difícil recomendar una novela de 1000 páginas porque no todo el mundo se atreve ni tiene ganas, pero si hay una que recomendar esa sería esta. Sin duda.

"-Sé que no te sirve- le dice por fin-, pero yo también te quiero, Jude".




Por Nitha

19 comentarios:

  1. Me llama mucho la trama y que hable de los hombres y de sus sentimientos de forma tan cruda es una buena razón para apuntármelo, aunque ahora necesito lecturas un poco más ligeras, no sé si podría con un libro tan largo. ¡Muchas gracias por tu reseña!

    Nos vemos entre páginas
    La vida de mi silencio

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo bueno de los libros es que los puedes leer cuando quieras así que no hay prisa. Yo tardé dos años en cogerlo por banda.
      Gracias por tu leerme. Besotes!

      Eliminar
  2. ¡Hola! Este libro lo quiero leer porque fue muy sonado y leí tantas buenas opiniones que me gustaría animarme pronto. Me parece genial que un libro despierte tantos sentimientos en una persona. Gracias por la reseña :). Ya te contaré si al final me animo pronto :D.
    Un beso desde Jardines de papel .
    ¡Nos leemos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Impaciente por saber qué opinas pero te aseguro que es toda una experiencia. Para mí fue como una catarsis pero es muy personal.
      Besotes!

      Eliminar
  3. Este libro me llamaba bastante la atención, pero me da una pereza inmensa ponerme con él. Algún dñia venceré a la pereza. Además que lo hayas disfrutado, ayuda a vencer poco a poco mi pereza

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo entiendo perfectamente, la extensión no invita. Yo es que a veces tengo como un presentimiento con los libros y este se me quedó en la retina y ahí se quedó. Aunque ahora no me arrepiento para nada.
      Gracias por leerme. Saludos!

      Eliminar
  4. Esta es una de esas novelas a las que todos consideran magníficas pero que seguramente nunca lea porque presiento que me producirá más dolor que disfrute. Tal vez me arrepienta de mi decisión, pero prefiero lecturas que me proporcionen otro tipo de evasión.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes toda la razón. En la reseña he intentado que se vea que no es un libro feel good, todo lo contrario. Uno tiene que estar dispuesto a sufrir. Quizás por las circunstancias de la vida estoy en un momento en que me apetecía "regodearme" en ese sufrimiento y me atreví, pero si no, no creo que sea el más adecuado.
      Gracias por pasarte por aquí. Besotes!

      Eliminar
  5. Holaaaa.
    Me quedo yo también por aquí. Me encantó ese libro, me destruyó, como a ti.
    Y por cierto, justamente en cuanto termine el que tengo entre manos yo tb voy a leer el de Aléxievich.
    Besitos, nos leemos ^^

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas! Que alegría verte por aquí. Pues si te animas con Alexievich estate preparada para otra tanda de dolor bien grande. Hace unos años me leí Voces de Chernobil (la reseña está por aquí también) y literalmente tenía que dejar el libro de lo que me revolvía las entrañas. Ahora con La guerra no tiene rostro de mujer no me pasa tanto pero aún así...
      Ya nos contarás qué te parece. Saludos!

      Eliminar
  6. Me dejas claro que es una novela muy dura y en estos momentos no podría disfrutar plenamente de ella, por eso la dejaré pasar. Quizás más adelante me atreva con ella...
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo es, y mucho. Nunca se sabe cuando apetecerá algo así. Es muy personal. Gracias por leerme.
      Besotes!

      Eliminar
  7. Es de esas novelas que nunca me había llamado la atención, pero ahora esta pedazo de reseña que has hecho me hace dudar.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola! Qué bien verte por aquí de vuelta. A mi me llamó la atención en seguida por lo de la amistad masculina. Al final ha sido un descubrimiento pero reconozco que no es para todo el mundo.
      Besotes!

      Eliminar
  8. He leído varias reseñas que invitan a leer esta novela, la tuya es espectacular y desde luego trasmites a la perfección todo lo que te ha gustado pero a mí sigue sin atraerme, creo que no la disfrutaría tanto.
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por los halagos y sé que no es una novela para todos. Hay tantos libros que salen cada día que hemos de ser selectivos con lo que cae en nuestras manos.
      Gracias por pasarte por aquí. Besotes!

      Eliminar
  9. No había esuchado nada del libro así que debi de perderme todos esos premios hace unos años. Definitivamente no todo el mundo se aventura a lecturas como esta pero suelen ser de las que mas merecen la pena. Cuando has comentado que la amistad masculina es un tema apenas existente en la literatura me he puesto a darle vueltas a títulos, y me he dado cuenta de que no se me ocurre ni una sola obra que le de cierta importancia al tema.

    Aunque quizá ahora mismo no estoy en mi momento para una lectura así me la apunto para un futuro cercano.

    Gracias por la entrada :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo de la amistad masculina y la "autodestrucción" de Jude es lo que más me llamó la atención, aunque tiene muchas más cosas. Y también me hizo leerla por ver tantos comentarios de la gente que decían que les había marcado. Eso es algo excepcional para mí.
      Gracias por pasarte por aquí y leerme.
      Besotes!

      Eliminar
  10. Que profundo y bonito y triste y a la vez sentido parece el libro, no había leído absolutamente nada de él y me metí en tu reseña como quien se adentra en el libro en sí, se nota que te gustó a pesar de todo y que lo has disfrutado a su manera muchísimo, gracias por recomendarlo y así hacerme saber de su existencia!

    ResponderEliminar