21 de diciembre de 2018

Sofía Petrovna. Una ciudadana ejemplar por Lidia Chukovskaia

Título: Sofia Petrovna. Una ciudadana ejemplarAutor: Lidia Chokóvskaia
Editorial: Errata Naturae
Nº Pág.: 192 pág.
Género: Novela Contemporánea, Novela Histórica
Escrita en 1939. Fecha de publicación original: 1965
Primera edición: octubre 2014


Sofia Petrovna, viuda de un prestigioso médico, trabaja como mecanógrafa en una de las más importantes editoriales de Leningrado. Parece que la vida y el Estado le sonríen a pesar de las continuas estrecheces: el resto de las mecanógrafas de la oficina está bajo su eficaz batuta; su sueldo es cada vez mayor; su propio hijo ha dejado de ser un muchacho para convertirse, al fin, en un joven y guapo ingeniero también ejemplar: ama la herencia de la Revolución y el Partido casi tanto como a su madre, a quien alienta en su dedicación y empeño. Estamos a mediados de los años treinta, y enseguida —en medio de un misterio que quizá nadie consiga resolver nunca— el vértigo innombrable de la Gran Purga va a arrastrar hasta el centro de su vacío a Kolia, el hijo. Comenzará entonces una «segunda» y ejemplar, en el sentido cervantino del término, novela: un verdadero aprendizaje sobre la vida y sus sinrazones, una parábola a la vez ingrata e insuperable; es decir, una pieza literaria de primer orden. O, como suele decirse, un texto que nos muestra la otra cara de la verdad, ésa que muchas veces inventamos nosotros mismos para no perder toda esperanza.

Por alguna razón tengo una especial ilusión de compartir ésta y la próxima reseñas. Ambas tratan de dos libros de una misma autora, existencia de la cual no he conocido hasta hace poco. Lidia Chukóvskaia es una escritora rusa, poco leídas por lo revolucionario de las obras y, durante mucho tiempo, prohibidas por el Kremlin. Por desgracia sólo he encontrado estos dos libros traducidos al español por Errata Naturae y, aunque yo sí puedo leerla en su lengua original y esa es mi intención, el lector español no puede disfrutar de su prosa. De todas maneras tengo entendido que esta editorial próximamente sacará otro volumen suyo que contendrá la traducción de las cartas que se enviaban Chukóvsaya y Ana Ajmátova, otra célebre autora rusa.

Antes de reseñar a Sofia Petrovna os quiero contar un poco del porqué de mi interés. Mi madre, aunque es bastante joven, ha nacido y se ha educado bajo el yugo de la Unión Soviética. Yo, en cambio, no. Yo me eduqué en un país independizado, europeo, empezando ver las cosas bajo el prisma de la libertad que eso supone. Los libros de historia cambiaron. Y mi madre, en cierto modo, vio que todo lo que le enseñaron tiene un reverso. Mucho se ha escrito sobre la dictadura nazi, pero muy poco sobre el estalinismo. Mucho sabemos de los campos de concentración pero muy poco del gulag ruso y las purgas de judíos y los "traidores a la patria" en la Unión Soviética. Será cierto que la historia la escriben los vencedores...

"Era increíble, aquellos canallas querían matar al querido Stalin. (...) Provocaban explosiones en las minas. Hacían descarrilar trenes. En casi todas las instituciones se había infiltrado secuaces suyos." pág. 59

Con todo esto quiero decir que la Unión Soviética, sobretodo en su origen, fue una de las dictaduras más duras que ha habido y, desde luego, es la más extensa en el tiempo porque aún hoy sigue vigente. Éste es el tema que se intenta visualizar en Sofia Petrovna. De hecho en realidad esta novela es una suerte de autobiografía de la autora novelada. Nuestra protagonista es una mujer de mediana edad, de unos cuarenta años. Es viuda de un médico y tiene un hijo casi adulto. Sofia trabaja como mecanógrafa en una editorial y se reconoce muy feliz: en el trabajo la han ascendido, su hijo es un muchacho apuesto y listo que va de camino a convertirse en un ingeniero. Su país está floreciendo bajo el mando del comunismo y la suerte les sonríe a todos y a todas. Sofia Petrovna cree en la Patria y el buen saber de sus gobernantes y es una ciudadana ejemplar.

Entonces llega el periodo 1937-1939, conocido por la historia como la Primera Gran Purga. El asesinato de un líder bolchevique Serguéi Kírov, en diciembre de 1934, da el pistoletazo de salida a miles de arrestos, interrogatorios y ejecuciones o condenas de muchos ciudadanos, la mayoría de los cuales nada tienen que ver con la resistencia. Cerca de un millón y medio de ciudadanos desparecidos. Uno de ellos será Kolia, el hijo de Sofia Petrovna. Ella no da crédito, se autoconvence de que lo soltarán en seguida porque es un gran error. Su hijo es un consumado komsomol (miembro de las juventudes del partido), un hombre educado y convencido de las bondades del comunismo. Sofia Petrovna acude a las autoridades, pasa horas, días en interminables colas ante los edificios oficiales en los que la despachan con dos frases "Pendiente de traslado", "Expediente en tránsito", "Condenado por confesión", etc, etc.

"No, Sofia Petrovna tenía razones para guardar distancias con sus vecinos en las colas. Le daba pena claro, desde un punto de vista humano, sobre todo los niños, pero, con todo, cualquier persona honesta debía recordar que todas esas mujeres eran las esposas y madres de envenenadores, espías y asesinos." pág. 102

Con ese panorama se produce un cambio catárquico en la vida de Sofia Petrovna. Sus vecinos ya no la saludan, la maltratan, quieren echarla de su casa. En el trabajo la desprecian, escriben artículos contra ella. Se convierte en una ciudadana ejemplar caída en desgracia, una paría. Pero ella sigue creyendo en el régimen. Ella, que tanto conoce a su hijo y lo quiere con todo el alma, empieza a preguntarse si de verdad él ha podido hacer algo, porque si ha confesado será por algo.

Esta novela está magistralmente escrita. Para las pocas páginas que tiene contiene todos los detalles de la transformación que sufre la protagonista al milímetro. No os esperéis un libraco de mil páginas con un lenguaje elaborado y culto, típico de los autores contemporáneos a Lidia Chukóvskaia. No. Éste es un libro escrito por una mujer cuyo marido fue detenido en las mismas circunstancias que Kolia, una mujer que esperó en muchas colas para saber qué había sido de él, que fue repudiada por sus vecinos. En definitiva es una especie de diario novelado. Hay las descripciones justas y diálogos abundantes. Con esto quiero decir que es el libro perfecto para perderle el miedo a la temida literatura rusa y además nos permite conocer un poco más la historia de la Revolución, pero no esa que está en los libros de historia, sino la real.

 "Si Sofia Petrovna no dormía por la noche, todas las horas y todos los minutos del día le resultaban idénticos. La luz le hería los ojos, le dolían las piernas, le pesaba el corazón. Pero si conseguía dormir durante la noche, el instante más penoso era, sin duda, el que seguía al despertar. (...) ...en algún punto de la zona del corazón le asaltaba una congoja, parecida a un dolor, y a través de la bruma de este dolor, se acordaba súbitamente de todo: Kolia sentenciado a diez años..." pág. 139

Sofia Petrovna fue redactada en secreto en un cuaderno escolar durante el invierno de 1939-1940. Obviamente no pudo ser publicada, incluso ese cuaderno fue pasando de mano a mano, escondido, de la vigilancia de los gobernantes. Ella misma apuntó: "mi obra se escribió con la huella de los acontecimientos aún fresca en mi mente". Sólo en los años sesenta una editorial extranjera se atrevió a publicar esta historia de una madre que intenta creer a su hijo y al fiscal a la vez, que pese a todo cree en el Partido. Y tuvieron que pasar veinte años más para que pudiera ser ofrecida al gran público en la Unión Soviética.

Se trata de la historia de una sociedad oprimida que se creía feliz y evolucionada. La verdad es que es una obra que me ha llegado y mucho. Destaca su gran sencillez, transparente en los sentimientos. Se transmiten de forma lineal los acontecimientos que se van conociendo tal como le llegan a la protagonista. Tampoco se descuida el entorno presentando algunos personajes secundarios, como el director de la editorial, Natasha, la compañera de trabajo, la familia de los Kipárisov o el amigo de Kolia. Se logra transmitir la realidad sin ser un panfleto político de la época y eso me ha cautivado.

Os recomiendo esta lectura muy encarecidamente. Aporta mucho y quita muy poco tiempo.


Por Nitha

6 comentarios:

  1. Hola guapa, parece interesantísimo. Y, como bien dices, se habla mucho de los nazis, pero nada del stalinismo... La verdad es que me lo pensaré... porque últimamente no me gusta ponerme con libros que implican desesperación y sufrimiento... Pero lo apunto por si algún día se me pasa la racha...
    Un besazo

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    1. La verdad es que en este libro no encontrarás mucha desesperación y sufrimiento, lo justo y lo necesario. El segundo libro de la autora, Inmersión, sí que tiene mucho de eso, así que ese no te lo recomiendo.
      Besotes!

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  2. Muy interesante este libro qeu nos traes hoy. De la Unión Soviética poco he leído, quizás porque como bien dices poco se ha escrito. Tomo buena nota.
    Besotes!!!

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    1. La verdad es que es una autora muy interesante y lo mejor de todo es que escribe de forma muy asequible para su época. Muy recomendable.
      Besotes!

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  3. Hola me alegra que disfrutaras del libro suena interesante me has gustado lo que cuentas así que me lo apunto. Saludos.

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    1. Gracias por pasarte por aquí y espero que te animes con la lectura.
      Nos leemos!

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